jueves, 21 de noviembre de 2013

Utopia

Utopiatik bi pausora, zure hitzen jabe zara, jabetu ezean.
Abstrakzioa da zure nahia, ikusten duzunak itxutzen zaitu. Ikusi nahi duzunak. 
Begiak itxi, ez duzu besterik behar ikusteko.
Utopiak, zure ibileratik bi pauso harago beti, zertarako balio du? 

Horretarako, ibiltzeko.

8

12:27. Retumba el teléfono. No para, suena importante. Descuelgan por ti y antes que tú. Al otro lado, espera tu hermano no sanguíneo. Escuchas pero no procesas. Un temblor dice ser dueño de tu espina dorsal. No le crees, no piensas, solo eres. Huyes por dentro.

Postrado sobre la cama, tus ojos gritan y no consigues entenderlos. De pronto, levantas la cabeza y no eres el mismo. Lo acabas de asimilar. La ausencia de cierta sonrisa será lucero en viajes de imborrables recuerdos, protagonistas en noches como ésta.

A un contemporáneo, compañero de camino, de equipo, de clase, de risas y de adversidades. 
A un amigo.


domingo, 10 de noviembre de 2013

Pyro

Es una hora cualquiera de la noche y no, no hay luna llena.

Estás en la cama. Imágenes del día, quizá sin importancia, ejercen resistencia ante el sueño que buscas y no acabas de encontrar. No te apetece leer.

Decides sacrificar tu mano izquierda al frío más allá de las mantas que te envuelven, buscando auriculares en el primer cajón de la solitaria pero conformista mesilla.

El esfuerzo ha valido la pena, recuperas la mano y tienes en tu poder que los vecinos no golpeen la pared mientras te pierdes entre sinfonías.

Le das al play y a reproducción aleatoria. Sale Pyro de Kings of Leon. Te dejas llevar por lo instrumental y te inventas lo que no entiendes de la letra en inglés yanki. Te acuerdas de que te fascinaba su melodía y lo pones en el bucle que precede al estado de trance. El sueño decide por tí y al final casi cedes.

Miras como puedes la hora, pero necesitarías verla otra vez para enterarte en que hora vives. Desvías la mirada a la ventana y descubres por primera vez que no hay luna llena. Abres la app de blogger y...

viernes, 8 de noviembre de 2013

Déjà vu

Asumir el rol de agujero negro y desprenderte de ti mismo. Ser mitosis en plena metástasis. Tener oídos solo para el oscuro pasajero. Escucharle. Mentir al orgullo. Discrepar al sentimiento. Susurrarle al viento una mirada. Quemar ríos de lava con guitarras. Explotar el tiempo. Soñar la noche. Cantarle al día. Olvidar el futuro. Crear el presente. Liberar la libertad. Persuadir evasiones. Dividir la nada. Respirar tinta. Escribir aire. Caminar sin dar un paso. Vestirse de sonrisas. Vomitar odio. Apedrear tropiezos. Ser piedra y no rodar. Esquivar esquinas. Contagiar placer. Dibujar voces. Plantar esperanzas. Regarlas o no. Volar bajo el agua. Saltarte la cola de la compra de la escalera al cielo. Olvidarte de pagarla. Que el camino se olvide de tí. Chutarte acordes. Beberte distancias. Fumarte la nostalgia. Mirar sin ver. Oír pero escuchar. Encontrarte a ti mismo en un déjà vu.

Despertar, reirte y esconder el lápiz, antes de ser consciente de no haber dormido.